Cuando
hablamos de los servicios de salud. En Argentina, tenemos un nivel aceptable
cuando hablamos de Obras Sociales/prepagas pero absurdas demoras con relación a
la asistencia en el servicio de salud pública, con raras excepciones.
En los
Estados Unidos, el Presidente Barack Obama enfrenta críticas sobre el nuevo
sistema de salud, el ObamaCare. Sin embargo, la tecnología de Internet de las
cosas (IoT) está ayudando a transformar el negocio de la medicina. La IoM
(Internet de medicina) debe ser la clave para reducir los costos médicos,
mejorar la calidad de los servicios y hacer accesible y personalizada la
atención médica para la mayoría de las personas, incluyendo a pacientes de
bajos ingresos y alejados de los principales centros de excelencia médica.
Desde un
punto de vista financiero, el impacto anual de la IoM pronto superará los $ 1
trillón de recetas y dependerá cada vez de los contratos recurrentes, en los
Estados Unidos. Uno de los principales promotores de IoM son las compañías de
seguros, grandes empresas farmacéuticas, hospitales y médicos. En lugar de
constantemente quejándose de los altos costos ellos se están moviendo para adoptar un nuevo modelo de
negocio.
Donde los
servicios de Cloud Computing permiten el almacenamiento de imágenes de exámenes
con pago de visualización de la imagen a demanda, evitando inversiones en
sistemas de almacenamiento de información de hospitales y laboratorios clínicos,
además de reducir gastos operacionales.
Según estudio
de McKinsey en Junio del 2015, el efecto
económico de las nuevas tecnologías de la salud relacionados con la computación
en nube puede variar entre US $ 170 billones a US $ 1,1 trillones en los
próximos años.
Uno de los
más grandes actores de la IoM es la industria de seguros, que sólo en los
Estados Unidos pagó más de $ 250 billones en el tratamiento médico en los
Estados Unidos. Los Hospitales están cumpliendo con las exigencias de las
compañías de seguros, cada vez más están adoptando tecnologías basadas en
sensores tales como chips inteligentes, etiquetas RFID, sistemas de
localización en tiempo real (RTLS) para organizar mejor el flujo de los pacientes, médicos, enfermeras, equipos y
suministros médicos.
La innovación
es un factor vital para el cuidado de la salud. El desafío es detectar
enfermedades tan pronto como sea posible y comenzar el tratamiento para la
curación, en lugar de tratamientos costosos cuando la enfermedad está en una
etapa avanzada.
Un ejemplo de
innovación es la colaboración entre Novartis y Google es una lente de contacto
para los diabéticos para medir su azúcar en la sangre a través de la lágrima de
los ojos. Además de un alivio para millones de diabéticos que ya no tendrán que
perforarse los dedos, las lentes proporcionan datos continuos sobre las fluctuaciones
de azúcar en la sangre e informaran al paciente para evitar complicaciones y riesgo
de vida.
La IoM
permitirá una medicina personalizada con un nuevo modelo de negocio donde la
gente paga por un servicio que ayudará a reducir el costo de las compañías de
seguros y planes de salud. Beneficiará a fabricantes de medicamentos, médicos y
hospitales y sobre todo pacientes. Inaugurará una nueva era en la medicina,
donde los pacientes tendrán más control sobre su salud, para mejorar su calidad
de vida.
Una evolución
de los servicios rápidos y con precio accesibles, serán servicios médicos
online con precios populares. Otra tendencia son los servicios médicos en las
farmacias con el apoyo de médicos y enfermería profesional en línea, utilizando
tecnologías de telemedicina en la nube. Exámenes
y diagnósticos se pueden hacer en pocos minutos con costos accesibles. También
será posible firmas de servicios médicos para el monitoreo en tiempo real de la
salud de los pacientes con enfermedades crónicas.
Imaginemos el
avance de los trabajos de instalación de servicios médicos con el apoyo del
personal de enfermería en lugares remotos con la atención médica en línea,
evitando a la gente viajes de hasta 8 horas para una consulta simple, como en
el norte del país.
Las ventajas
de la tecnología son inmensas. Ahora, como todo lo que es nuevo enfrentará a
los problemas clásicos de la innovación: resistencia al cambio de los
profesionales y demora en la regulación de nuevos servicios. Depende de
nosotros para presionar por cambios rápidos en esta área para mejorar nuestra
calidad de vida y reducir los costos de salud.
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